Los tres métodos se utilizan para ejecutar cruces subterráneos sin abrir zanjas, pero cada uno responde a condiciones geotécnicas, longitudes y niveles de precisión distintos. El microtúnel —el método principal de Eurohinca— ofrece la mayor precisión y control de presión, especialmente en suelos complejos. La perforación horizontal dirigida (HDD) resulta más flexible y económica en trazados con amplias curvaturas, mientras que Direct Pipe combina empuje continuo con tuneladora y es idóneo para cruces bajo ríos, zonas sensibles o ductos presurizados.
El microtúnel (microtunneling) es una técnica de excavación mecanizada con tuneladora teledirigida (MTBM) que trabaja desde un pozo de ataque y empuja la tubería mientras excava. Permite controlar la presión de frente, la alineación y la pendiente con precisión milimétrica, incluso en suelos complejos y bajo nivel freático. Es la opción más robusta cuando el cruce pasa por entornos urbanos, infraestructuras críticas o geotecnia complicada. Puedes ver una explicación completa de la tecnología en el artículo qué es el microtunneling y cuáles son sus aplicaciones principales.
La perforación horizontal dirigida (HDD) se basa en una perforación piloto seguida de uno o varios escariados. Es muy competitiva en cruces largos y curvos, con menor obra civil de pozos, siempre que el terreno tenga estabilidad suficiente. En la página de perforación horizontal dirigida se describen sus fases, ventajas y aplicaciones típicas en cruces de carreteras, ríos o servicios enterrados.
El Direct Pipe® combina un escudo en cabeza similar al microtúnel con el empuje directo de la tubería producto en una sola operación continua. Es especialmente interesante para grandes diámetros y cruces bajo ríos o zonas ambientalmente sensibles, donde se pide alta estanqueidad y mínima ocupación de superficie. Eurohinca describe esta técnica en su página de Direct Pipe.

