Un cruce de infraestructuras subterráneas es el punto en el que una nueva conducción (agua, saneamiento, gas, fibra, etc.) atraviesa —o discurre muy próxima a— otra instalación existente, una vía férrea, un río o una carretera. Su diseño y ejecución combinan ingeniería civil, topografía de precisión y normativa sectorial para evitar daños, interferencias o paradas de servicio.
Pasos clave de gestión
- Recopilación de datos y localización de servicios
GIS municipal, planos “as-built” y cartografía de proveedores. Georradares (GPR), localizadores electromagnéticos y “potholing” para verificar cotas reales. - Modelado y detección de colisiones
Integración en entorno BIM/3D para calcular separaciones mínimas y radios de curvatura. Criterios habituales: > 300 mm entre agua y gas; > 1 D frente a líneas de alta tensión. - Selección del método constructivo
Entorno Técnicas habituales Ventajas principales Cruces cortos y suelo blando Pipe jacking, microtunneling Control de pendiente y escasa afección superficial Largos > 150 m o trazados curvos Perforación Horizontal Dirigida (HDD) Mayor alcance y curvatura progresiva Rocas o poca sobrecarga Túnel mecanizado o martillo neumático Velocidad en roca y mínima desviación Parques, cauces o zonas sensibles Hinca con camisa, auger boring Menor volumen de lodos y huella ambiental reducida - Diseño estructural y protección
Camisa de acero u hormigón como tubo escudo; relleno con lechada para repartir cargas. Recubrimientos anticorrosión y protección catódica en conducciones paralelas. - Permisos y acuerdos de cruce
Convenios con administraciones viales/ferroviarias y titulares de servicios. Estudios de vibración y asentamiento exigidos por ADIF, Carreteras o Autoridades Portuarias. - Construcción y control de ejecución
Replanteo topográfico con láser y giroscopio (tolerancia típica ± 10 mm/100 m). Monitorización en tiempo real de empuje, par, presión de lodos y asentamientos superficiales. - Pruebas y puesta en servicio
CCTV o sonda láser para verificación de alineación y ovalidad. Ensayo de estanqueidad según EN 1610 o API RP 1110 dependiendo del fluido. - Gestión posterior
Levantamiento “as-built”, actualización del GIS y manual de O&M. Inspecciones programadas y telemetría para detectar fugas o subsidencias durante el ciclo de vida.
Buena práctica: definir una “ventana de cruce” en planta y alzado, con zona de exclusión y carril de mantenimiento futuro, para que nuevas redes no invadan el espacio crítico.