¿Cómo funciona la perforación horizontal dirigida y en qué proyectos se utiliza?

La perforación horizontal dirigida (PHD) es una técnica de excavación mínimamente invasiva que permite instalar infraestructuras subterráneas sin la necesidad de abrir grandes zanjas en la superficie. Este método utiliza equipos de perforación especializados que crean un túnel estrecho siguiendo una trayectoria previamente establecida gracias a avanzados sistemas de navegación y control en tiempo real.

El proceso comienza con un detallado estudio geotécnico y topográfico del terreno, que permite definir la ruta óptima y prever obstáculos en el subsuelo. Una vez planificada, se realiza una perforación piloto para establecer el trayecto exacto. Durante esta fase, la máquina perforadora se dirige guiada por sensores que permiten ajustar la dirección y mantener la precisión en la trayectoria. Después, se ensancha el túnel piloto, se instala el conducto o tubería necesario y, en muchos casos, se procede al relleno o sellado del hueco para asegurar la estabilidad del sistema.

La precisión y el control que ofrece la PHD permiten sortear obstáculos como carreteras, ríos o infraestructuras existentes sin perturbar la superficie, lo que reduce significativamente las molestias a la comunidad y los costos de restauración. Esta tecnología es especialmente útil para la instalación de redes de agua, alcantarillado, gas y telecomunicaciones, ya que se adapta tanto a entornos urbanos como rurales. Además, al optimizar el proceso y minimizar la intervención en la superficie, se acortan los tiempos de obra y se reducen los costos operativos, haciendo de la PHD una solución eficiente y sostenible para proyectos de infraestructura críticos.